En nuestro artículo anterior dejábamos la interrogante: ¿puede el ser humano no comunicar absolutamente nada?

Esto no es posible.

Hasta con nuestro silencio estamos comunicando.

Podría ser: “estoy escuchando atentamente”, “prefiero ni contestar a tu pregunta”, “¿qué hago?” “¿qué estoy haciendo aquí?” Y podría seguir con múltiples y posibles situaciones que se pueden dar estando totalmente callado sin expresar movimiento alguno. Cada uno de nosotros elegimos una forma de comunicación con los demás según nuestra forma de ser, inspiración, estado de ánimo, especial circunstancia o sentimiento que surge con quien nos estamos comunicando aunque en realidad, tenemos un patrón bien definido y así es que obtenemos los resultados para cada caso.

Ahora, todos estos modelos incluyen diferentes formas, más concretamente tres posibles mecanismos de utilización. Esta especificación ha sido desarrollada por la Programación Neuro Lingüística (PNL) determinado la valorización para cada una de estas tres posibles variables: 1- lenguaje del cuerpo, 2-tono de voz y 3-las palabras. Hay investigaciones que demuestran que en un grupo de personas, el 55% del impacto comunicacional viene determinado por el lenguaje corporal (gestos, movimientos, postura, contacto visual), el 38% por el tono de voz y solo el 7% por el contenido, las palabras.

Nos imaginamos que les ha sucedido alguna vez que, una comunicación realizada a través de celular por SMS o correo electrónico ha sido mal interpretada por el receptor. Esto se debe a que por estos medios, solo estamos trasmitiendo el 7% de lo que podríamos trasmitir.

Como conclusión de lo expresado y primera regla tenemos que: “La comunicación presencial es la forma más eficaz para lograr resultados positivos”

Hay personas que nos expresan cosas (palabras) que no concuerdan con sus gestos (lenguaje corporal) y entonces decimos: “este tipo nos está mintiendo” ¿porqué? Porque la incidencia que tiene el lenguaje del cuerpo es muy superior al de las palabras.

Aprendamos a leer estos signos y descubriremos con certeza donde está la verdad y en base a ello tomaremos las mejores decisiones.

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